DIOSES MAYORES
AFRODITA
Diosa del amor y la belleza. En la Iliada de Homero aparece como la hija de Zeus y Dione, una de sus consortes, pero
en leyendas posteriores se la describe brotando de la espuma del mar y su nombre puede traducirse como 'nacida de la espuma'.
En la leyenda homérica, Afrodita es la mujer de Hefesto, el feo y cojo dios del fuego. Entre sus amantes figura Ares, dios
de la guerra, que en la mitología posterior aparece como su marido. Ella era la rival de Perséfone, reina del mundo subterráneo,
por el amor del hermoso joven griego Adonis.
APOLO
Hijo
del dios Zeus y de Leto, hija de un titán. Era también llamado Délico, de Delos, la isla de su nacimiento, y Pitio, por haber
matado a Pitón, la legendaria serpiente que guardaba un santuario en las montañas del Parnaso. En la leyenda homérica, Apolo
era sobre todo el dios de la profecía. Su oráculo más importante estaba en Delfos, el sitio de su victoria sobre Pitón. Solía
otorgar el don de la profecía a aquellos mortales a los que amaba, como a la princesa troyana Casandra.
Apolo era un músico dotado, que deleitaba a los dioses tocando la lira. Era también un arquero diestro y un atleta
veloz, acreditado por haber sido el primer vencedor en los juegos olímpicos. Su hermana gemela, Ártemis, era la guardiana
de las muchachas, mientras que Apolo protegía de modo especial a los muchachos. También era el dios de la agricultura y de
la ganadería, de la luz y de la verdad, y enseñó a los humanos el arte de la medicina.
ARES
Dios
de la guerra e hijo de Zeus, rey de los dioses, y de su esposa Hera. Agresivo y sanguinario, Ares personificaba la brutal
naturaleza de la guerra, y era impopular tanto para los dioses como para los seres humanos.
ARTEMIS O ARTEMISA
Una de las principales diosas. Era hija del dios Zeus y de Leto y hermana gemela del dios Apolo. Era la rectora
de los dioses y diosas de la caza y de los animales salvajes, especialmente los osos, Ártemis era también la diosa del parto,
de la naturaleza y de las cosechas. Como diosa de la luna, se la identificaba a veces con la diosa Selene y con Hécate.
ATENEA
Una
de las diosas más importantes en la mitología griega. Atenea salió ya adulta de la frente del dios Zeus y fue su hija favorita.
Él le confió su escudo, adornado con la horrorosa cabeza de la górgona Medusa, su 'égida' y el rayo, su arma principal. Diosa
virgen, recibía el nombre de Parthenos ('la virgen'). En agradecimiento a que Atenena les había regalado el olivo, el pueblo
ateniense levantó templos a la diosa, el más importante era el Partenón, situado en la Acrópolis de Atenas.
Atenea, originariamente la diosa de las ciudades griegas, de la industria y de las artes, y, en la
mitología posterior, de la sabiduría; era también diosa de la guerra.
Atenea era también
patrona del arte de la agricultura y de las labores femeninas, especialmente del hilado y el tejido. Entre sus dones al hombre
estaban la invención del arado y la flauta y las artes de domesticación de animales, de construcción de barcos y de fabricación
de zapatos. Se la asociaba a menudo con las aves, especialmente con la lechuza.
CRONOS
Gobernador
del universo durante la edad de oro. Era uno de los doce titanes y el hijo menor de Urano y de Gea, las personificaciones
del cielo y de la tierra. Sus primeros hijos fueron los tres Hecatonquiros, los monstruos de cien manos y cincuenta cabezas
a quienes Urano había apresado en un lugar secreto. Gea trató de rescatarlos y pidió ayuda a sus otros hijos, incluidos los
cíclopes. Sólo Cronos aceptó el desafío. Atacó a Urano y lo hirió gravemente; Cronos se convirtió así en el regidor del universo.
Cronos y su hermana la reina Rea llegaron a ser padres de seis de los doce dioses y diosas
conocidos como los Olímpicos. A Cronos se le había profetizado que sería derrocado por uno de sus hijos, y se comió a los
cinco primeros al poco tiempo de nacer. Rea, sin embargo, ocultó a su sexto hijo, Zeus, y ofreció a su hermano y esposo una
piedra envuelta en pañales. Zeus se crió en Creta y cuando creció, forzó a Cronos, con la ayuda de Gea, a vomitar junto con
la piedra a los otros cinco niños. Ésta después fue trasladada a Delfos. Zeus y sus cinco hermanos y hermanas libraron la
guerra contra Cronos y los demás titanes ayudado por los Hecatonquiros y los cíclopes, a quienes liberó de la prisión donde
los había encerrado su padre. Cronos y los titanes fueron confinados en el Tártaro, un abismo en la parte más profunda del
submundo.
DEMETER
diosa de los granos y de las cosechas, hija de los titanes Cronos y Rea. Cuando su hija Perséfone fue raptada por Hades,
dios del mundo subterráneo, el dolor de Démeter fue tan grande que descuidó la tierra; no crecieron plantas y el hambre devastó
el universo. Consternado ante esta situación, Zeus, el regidor del mundo, pidió a su hermano Hades que devolviese Perséfone
a su madre. Hades asintió, pero antes de liberar a la muchacha hizo que ésta comiese algunas semillas de granada que la obligarían
a volver con él durante cuatro meses al año. Feliz de reunirse de nuevo con su hija, Démeter hizo que la tierra produjese
flores primaverales y abundantes frutos y cereales para las cosechas. Sin embargo, su dolor retornaba cada otoño cuando Perséfone
tenía que volver al mundo subterráneo. La desolación del invierno y la muerte de la vegetación eran consideradas como la manifestación
anual del dolor de Démeter cuando le arrebataban a su hija.
DIONISO
Dios del vino y la vegetación, el cual enseñó a los mortales cómo cultivar la vid y cómo hacer vino. Era bueno y amable
con quienes lo honraban, pero llevaba la locura y la destrucción a quienes lo despreciaban a él o a los rituales orgiásticos
de su culto. De acuerdo con la tradición, Dioniso moría cada invierno y renacía en la primavera. Para sus adeptos, este renacimiento
cíclico, acompañado de la renovación estacional de los frutos de la tierra, encarnaba la promesa de la resurrección de los
muertos.
EOLO
Guardián
de los vientos. Vivía en la isla flotante de Eolia con sus seis hijos y sus seis hijas. El dios Zeus le había dado el poder
de aplacar y provocar los vientos.
GAYA O GEA
Personificación de la madre tierra e hija de Caos. Fue madre y esposa del padre cielo, personificado como Urano. Ambos
fueron los padres de las primeras criaturas vivas, los titanes, los cíclopes y los gigantes-los hecatonquiros (los provistos
de cien cabezas). Temiendo y aborreciendo a los monstruos, aunque eran sus hijos, Urano los encerró en un lugar secreto de
la tierra, pero dejó a los cíclopes y a los titanes en libertad. Gea, irritada por tal favoritismo, persuadió a su hijo, el
titán Cronos, de derrocar a su padre. Castró a Urano, y de su sangre Gea hizo nacer otra raza de monstruos, los gigantes,
y las tres diosas vengadoras, las Erinias. Su último y más terrible vástago fue Tifón, un monstruo de cien cabezas que, aunque
vencido por el dios Zeus, se creía que arrojaba chorros de lava fundida del monte Etna.
HADES
Dios
de los muertos. Era hijo del titán Cronos y de la titánide Rea y hermano de Zeus y Poseidón. Cuando los tres hermanos se repartieron
el universo después de haber derrocado a su padre, Cronos, a Hades le fue concedido el mundo subterráneo. Allí, con su reina,
Perséfone, a quien había raptado en el mundo superior, rigió el reino de los muertos. Aunque era un dios feroz y despiadado,
al que no aplacaba ni plegaria ni sacrificio, no era maligno.
HEFESTO
Dios del fuego y de la metalurgia, hijo del dios Zeus y de la diosa Hera o, en algunos relatos, sólo hijo de Hera. A
diferencia de los demás dioses, Hefesto era cojo y desgarbado. Poco después de nacer lo echaron del Olimpo: según algunas
leyendas, lo echó la misma Hera, quien lo rechazaba por su deformidad; según otras, fue Zeus, porque Hefesto se había aliado
con Hera contra él. En la mayoría de las leyendas, sin embargo, volvió a ser honrado en el Olimpo y se casó con Afrodita,
diosa del amor, o con Áglae, una de las tres gracias. Era el artesano de los dioses y les fabricaba armaduras, armas y joyas.
Se creía que su taller estaba bajo el monte Etna, volcán siciliano.
HERA
Reina
de los dioses, hija de los titanes Cronos y Rea, hermana y mujer del dios Zeus. Hera era la diosa del matrimonio y la protectora
de las mujeres casadas.
HERMES
Mensajero
de los dioses, hijo del dios Zeus y de Maya, la hija del titán Atlas. Como especial servidor y correo de Zeus, Hermes tenía
un sombrero y sandalias aladas y llevaba un caduceo de oro, o varita mágica, con serpientes enrolladas y alas en la parte
superior. Guiaba a las almas de los muertos hacia el submundo y se creía que poseía poderes mágicos sobre el sueño. Hermes
era también el dios del comercio, protector de comerciantes y pastores. Como divinidad de los atletas, protegía los gimnasios
y los estadios, y se lo consideraba responsable tanto de la buena suerte como de la abundancia. A pesar de sus virtuosas características,
también era un peligroso enemigo, embaucador y ladrón.
HESTIA
Diosa
virgen del hogar, la hija mayor de los titanes Cronos y Rea. Se consideraba que presidía todos los fuegos de las aras de sacrificio
y se le ofrecían plegarias antes y después de las comidas.
LAS MUSAS
Nueve diosas e hijas del dios Zeus y Mnemosine, la diosa de la memoria. Las musas presidían las Artes y las Ciencias
y se creía que inspiraban a los artistas, especialmente a poetas, filósofos y músicos.
Calíope Musa de la Poesía épica.
Clío
Musa de la Historia.
Euterpe Musa de la Poesía lírica.
Melpómene Musa de la Tragedia.
Terpsícore
Musa de la Música y la Danza.
Erato Musa de la Poesía amorosa.
Polimnia Musade la Poesía sagrada y la pantomima.
Urania Musa de la Astronomía.
Talía Musa de
la Comedia.
LAS PARCAS O MOIRAS
Las tres diosas que determinaban la vida humana y el destino. Conocidas como Moiras en griego y como Parcae en latín,
las Parcas asignaban a cada persona al nacer una parte del bien y del mal, aunque la gente podía acrecentar el mal por su
propio desatino. Retratadas en el arte y la poesía como ancianas severas o como melancólicas doncellas, se las representaba
siempre como tejedoras.Las decisiones de las Parcas no podían ser alteradas, ni siquiera por los dioses.
Cloto La Hilandera que hilaba el hilo de la vida) Daba la vida a los hombres.
Láquesis (La Distribuidora de Suertes) Decidía su duración y asignaba a cada
persona su destino.
Átropo (La Inexorable) Llevaba las temibles tijeras
que cortaban el hilo de la vida en el momento apropiado.
POSEIDÓN O POSIDÓN
Dios del mar, hijo del titán Cronos y la titánide Rea, y hermano de Zeus y Hades. Poseidón era marido de Anfitrite,
una de las nereidas, con quien tuvo un hijo, Tritón. Poseidón, sin embargo, tuvo otros numerosos amores, especialmente con
ninfas de los manantiales y las fuentes, y fue padre de varios hijos famosos por su salvajismo y crueldad, entre ellos el
gigante Orión y el cíclope Polifemo. Poseidón y la górgona Medusa fueron los padres de Pegaso, el famoso caballo alado.
REA
Madre
de los dioses. Era una titánida, hija de Urano y de Gea, Cielo y Tierra, y hermana y mujer del titán Cronos. Durante mucho
tiempo, Cronos y Rea gobernaron el universo. Fue la madre de Zeus, el rey de los dioses, Poseidón, dios del mar; Hades, dios
de los muertos; Démeter, diosa de la tierra; Hestia, diosa del hogar, y Hera, diosa del matrimonio.
TEMIS
Una
de las titánidas, hija de Urano y Gea, el Cielo y la Tierra, y madre de las tres Parcas y de las Estaciones. Diosa de la justicia
y la ley divinas.
ZEUS
Dios
del cielo y soberano de los dioses olímpicos.
Según Homero, se consideraba a Zeus
padre de los dioses y de los mortales. No fue el creador de los dioses y de los hombres; era su padre en el sentido de protector
y soberano tanto de la familia olímpica como de la raza humana. Señor del cielo, dios de la lluvia y acumulador de nubes,
que blandía el terrible rayo. Su arma principal era la égida, su ave, el águila, su árbol, el roble. Zeus presidía a los dioses
en el monte Olimpo. Fue salvado por Hera, su madre, de ser devorado por su padre cuando nació.
DIOSES INFERIORES Y SEMIDIOSES
ANTEROS
Su madre fue Afrodita y era el hermano gemelo de Eros, dios del amor. Anteros era el dios del amor correspondido, como
indica su propio nombre. Anteros es representado como un joven que crece al encontrarse al lado de Eros y se convierte en
un niño pequeño cuando no está en su compañía.
ASCLEPIO
Era hijo de Apolo y de Corónide, una hermosa muchacha de Tesalia. Ésta le era infiel, por lo que Apolo la mató entregando
a su hijo recién nacido al centauro Quirón para que lo criara. Quirón le educó en la ciencia de la medicina y le enseñó todo
sobre las hierbas, las plantas y la composición de los medicamentos, dando lugar a que, gracias a su inteligencia, Asclepio
sobrepasara las capacidades de su maestro. Se le representa como un hombre barbudo con un palo con una serpiente enroscada
y va acompañado de un gallo a sus pies, símbolo de vigilancia. Sus hijos Podaliro y Macaonte también fueron grandes médicos
a la par que bravos soldados. Los enfermos de Grecia creían que si acudían a algún templo a él consagrado y le ofrecían sacrificios
éste se les aparecería en sueños recetándoles un remedio a su problema.
CIRCE
Sus
padres fueron Helios, el primer dios del sol, antes que Apolo, y la nereida Perseis, por lo tanto Circe era una semidiosa
que representaba a la deidad de los hechiceros. Circe era, a su vez, princesa de la Cólquide, aunque destacó por ser una maga
cruel, hipócrita y celosa.
CLORIS
Diosa
de las flores y de la primavera, casada con Céfiro, quien la raptó al enamorarse de ella pero después le otorgó la eterna
juventud como recompensa y le encargó el cuidado de las flores y jardines. Es representada como una doncella con una corona
de flores y un vestido también adornado de esta forma.
COMO
Era
el dios de los banquetes, de la alegría y de las danzas nocturnas y no tenía ni templo ni sacerdotes. Tampoco se sacrificaban
animales en su honor pero sí se le invocaba al principio de todas las comidas.
DIKÉ
La
justicia, protegía las empresas nobles de los hombres.
ENIO
Era
la diosa de la guerra y compañera inseparable de Ares. Esta preparaba el carro de Ares para la guerra y luchaba junto a él
en las batallas.
ERINIAS (Las)
Las tres deidades vengadoras En la mayoría de los relatos, las Erinias son las hijas de Gea y Urano; a veces
reciben el nombre de hijas de la Noche. Vivían en el mundo inferior, de donde ascendían a la tierra para perseguir a los malvados.
Eran justas pero despiadadas y no atendían a circunstancias atenuantes. Castigaban todos los ultrajes contra la sociedad humana
tales como el perjurio, la violación de los ritos de hospitalidad y, sobre todo, los delitos de sangre.
Tisífone (la vengadora del crimen)
Megera (la
de los celos)
Alecto (siempre encolerizada).
ERIS
Diosa
de la discordia.
EROS
Dios
del amor. En la mitología más antigua se le representaba como una de las fuerzas primigenias de la naturaleza, el hijo de
Caos, y como encarnación de la armonía y del poder creativo en el universo. Pronto, sin embargo, se le consideró como un hermoso
y apasionado joven, acompañado por Poto o Hímero ('el Deseo'). La mitología posterior hizo de él el permanente acompañante
de su madre, Afrodita, diosa del amor.
FEME
Diosa
de la fama. Incansable habladora y propagadora de noticias o "chismes".
GRACIAS
Las tres diosas de la alegría, el hechizo y la belleza. Hijas del dios Zeus y la ninfa Eurínome, Las Gracias presiden
los banquetes, las danzas y todos los demás acontecimientos sociales placenteros, y proporcionan alegría y buena voluntad
tanto a dioses como a mortales. Eran especial compañía de las divinidades del amor, Afrodita y Eros, y junto con sus compañeras
las musas, cantaban a los dioses en el monte Olimpo y danzaban al ritmo de la hermosa música que Apolo interpretaba en su
lira.
Áglae (esplendor)
Eufrosine
(mirra)
Talía (buen ánimo).
HEBE
Diosa
de la juventud, hija de Zeus y Hera. Durante mucho tiempo, Hebe cumplía la función de copera de los dioses, a quienes les
servía néctar y ambrosía. El príncipe troyano Ganimedes la sustituyó en esta tarea. De acuerdo con una versión, dejó de ser
copera de los dioses cuando se casó con el héroe Hércules, que acababa de ser deificado.
HÉCATE
Diosa
de la oscuridad e hija de los titanes Perses y Asteria. A diferencia de Ártemis, que representaba la luz lunar y el esplendor
de la noche, Hécate representaba su oscuridad y sus terrores. Se creía que, en las noches sin luna, ella vagaba por la tierra
con una jauría de perros fantasmales y aulladores. Era la diosa de la hechicería y lo arcano, y la veneraban especialmente
magos y brujas, quienes le ofrecían en sacrificio corderos y perros negros. Como diosa de las encrucijadas, se creía que Hécate
y su jauría de perros aparecían en esos espacios apartados, que eran para los viajeros lugares demoníacos y espectrales. El
arte representa a Hécate a menudo con tres cuerpos o tres cabezas y con serpientes entrelazadas alrededor de su cuello.
HELIOS
Antiguo
dios del Sol , hijo de los titanes Hiperión y Tía, hermano de Selene, diosa de la luna, y de Eos, diosa de la aurora. Cada
día, Helios conducía su carro de oro a través del cielo proporcionando luz a dioses y mortales. Al anochecer se sumergía en
el océano occidental, desde donde era conducido en una copa de oro de regreso a su palacio de Oriente. Sólo Helios podía controlar
los feroces caballos que tiraban de su carro fogoso. Su hijo Faetón murió después de convencerle de que le dejara guiar el
carro solar por el cielo.
HIBRIS
Diosa
de la rebeldía y la insolencia.
HIMENEO
Dios que presidía los actos nupciales. Fue el hijo de Apolo y Afrodita.
HIPNOS
Dios
del sueño (no de los sueños).
IRENE
Diosa
de la paz
IRIS
Diosa
del arco iris, hija del titán Taumante y de Electra, hija del titán Océano. Como mensajera del dios Zeus y de su mujer, Hera,
Iris abandonó el Olimpo sólo para transmitir los divinos mandatos a la humanidad, por lo que se la consideraba una consejera
y una guía. Viajando a la velocidad del viento, podía ir de un extremo al otro de la tierra y también al fondo del mar o a
las profundidades del submundo. Aunque era hermana de los monstruos alados, las harpías, Iris aparecía representada como una
hermosa joven, con alas y con ropa de colores brillantes y un halo de luz sobre su cabeza, atravesando el cielo con un arco
de donde proviene el término arco iris que formaba su estela.
MORFEO
dios
de los sueños, hijo de Somnus, dios del sueño. Morfeo formaba los sueños de quienes dormían. También representaba seres humanos
en los sueños.
NEMESIS
personificación de la justicia divina y de la venganza de los dioses, a veces llamada hija de la noche. Representaba
la legítima ira de los dioses contra la soberbia y la altivez, y contra los transgresores de la ley; distribuía la buena o
mala fortuna a todos los mortales. Nadie podía escapar de su poder.
NEREO
dios
del mar, hijo del dios marino Ponto y de Gea, la madre tierra, llamado el viejo hombre del mar. Se casó con Doris, hija del
titán Océano, con quien tuvo cincuenta hijas hermosas, las ninfas del mar, llamadas nereidas. Nereo vivía en el fondo del
mar.
NIKÉ
Diosa
de la victoria, hija del titán Palante y del río Éstige. Niké luchó con el dios Zeus en su batalla contra los titanes, y en
el arte griego se representa a veces alada y llevando una guirnalda o palma de la victoria.
NIX
La
noche
OCÉANO
Uno
de los titanes, hijo de Urano y Gea. Con su mujer, la titánida Tetis, dominaba el Océano, un gran río que circundaba la tierra,
a la que se consideraba un círculo plano. Las ninfas de este gran río, las oceánides, eran sus hijas, y los dioses de todos
los ríos de la tierra eran sus hijos. En leyendas posteriores, cuando Zeus, jefe de los dioses olímpicos, y sus hermanos,
Poseidón y Hades, derrocaron a los titanes y asumieron su poder, Poseidón y su mujer, Anfitrite, sucedieron a Océano y a Tetis
como soberanos de las aguas.
PAN
Dios
de los bosques, los campos y la fertilidad, hijo de Hermes, mensajero de los dioses, y de una ninfa. En parte animal, con
los cuernos, las patas y las orejas de un macho cabrío, era una divinidad robusta, dios de los pastores y de los cabreros.
Músico magnífico, con su flauta de carriza o caramillo acompañaba a las ninfas del bosque mientras danzaban. Inventó esta
flauta cuando iba persiguiendo a la ninfa Siringa y la transformó en un lecho de cañas para que no pudiera escapar de él;
Pan, entonces, tomó cañas de longitud desigual y tocó con ellas. El dios galanteaba siempre a las ninfas tocando el instrumento,
pero todas lo rechazaban por su fealdad. Sus lugares preferidos eran las montañas, las cuevas y parajes agrestes, pero su
favorito era la Arcadia, donde había nacido. Se supone que la palabra pánico deriva del temor que sentían los viajeros cuando
oían el sonido de su flauta en la soledad de la noche.
PRIAPO
Dios
de la fertilidad, protector de jardines y rebaños. Era hijo de Afrodita, diosa del amor, y de Dioniso, dios del vino, o, según
algunos relatos, de Hermes, mensajero de los dioses. Solía representarse a Príapo como un individuo grotesco con un falo enorme.
SELENE
Diosa
de la luna, hija del titán Hiperión y de la titánide Tía, y hermana de Helios, dios del sol. Selene se enamoró del joven y
apuesto pastor Endimión, a quien sumió en un sueño eterno para que nunca pudiera abandonarla. En el arte, Selene aparece conduciendo
un carro tirado por dos caballos o, a veces, por dos bueyes. Se la identifica a menudo con la diosa olímpica de la luna, Ártemis.
SILENO
El
mayor de los sátiros, hijo de Hermes, mensajero de los dioses, o de Pan, dios de los bosques. Tutor del joven dios Dioniso,
Sileno solía acompañarlo en sus viajes. El viejo sátiro estaba a menudo borracho y, capturado en estado de embriaguez, podían
obligarlo a predecir el futuro.
TÁNATO
Dios
de la oscuridad y la muerte.
TETIS (nereida)
Hija de las divinidades marinas Nereo y Doris, y la más famosa de las nereidas. La pretendieron Zeus, el dios supremo,
y también Poseidón, dios del mar, quienes le comunicaron la profecía de que daría a luz un hijo que sería más poderoso que
su padre. Fue entregada a Peleo, gobernador de los mirmidones, quien era considerado el más digno entre los mortales. De esta
unión, Tetis concibió al héroe Aquiles.
TETIS (titán)
Una titánida hija de Urano, dios del cielo, y de Gea, diosa de la tierra. Tetis era la mujer de su hermano Océano
y, por su unión, madre de las 3.000 Oceánides o ninfas del océano, y de todos los dioses de los ríos.
OTROS PERSONAJES MITOLÓGICOS
ADONIS
Hermoso
joven amado por las diosas Afrodita y Perséfone. Nacido de la unión incestuosa del rey Cíniras de Chipre y de su hija, Adonis
fue puesto bajo la custodia de Perséfone, reina del mundo subterráneo. Cuando Adonis murió al ser atacado por un jabalí salvaje
al que cazaba, Afrodita imploró al dios Zeus que se lo devolviese. Zeus decretó que Adonis pasaría los meses invernales con
Perséfone en el Hades y los estivales con Afrodita. La historia de su muerte y resurreción es símbolo del ciclo natural de
la muerte y el renacimiento.
AMAZONAS
Una raza de mujeres guerreras que excluían a los hombres de su sociedad. Las amazonas tenían ocasionalmente relaciones
sexuales con hombres de los estados vecinos, y mataban o enviaban a vivir con sus padres a los hijos varones que parían. Las
niñas eran entrenadas como arqueras para la guerra, y la costumbre de quemarse el seno derecho fue practicada para facilitar
la tensión del arco, de ahí el nombre de amazonas, derivado de la palabra griega que significa sin pecho.
ANDRÓMEDA
Princesa de Etiopía. Su madre, Casiopea, irritó al dios Poseidón por jactarse de ser más hermosa que las ninfas del mar,
las Nereidas. Como castigo, Poseidón envió un horrible monstruo marino a devastar la Tierra. Los etíopes pudieron saber, a
través de un oráculo, que serían liberados del monstruo si ofrecían a Andrómeda como víctima de sacrificio. La doncella fue
encadenada a una roca a orillas del mar, pero la rescató el héroe Perseo, quien mató al monstruo y reclamó la mano de Andrómeda
como recompensa.
ARACNE
Una
joven tan hábil en el arte del tejido que se atrevió a desafiar a la diosa Atenea, patrona de las artes y de los oficios,
a una competición. Mientras que Atenea tejía un tapiz que representaba a los dioses y las diosas en todo su esplendor, Aracne
tejía uno que ilustraba sus romances. Furiosa por la perfección de la obra de la muchacha, Atenea arrancó sus hilos y Aracne
quedó presa en ellos. Sin embargo, por piedad, Atenea soltó la cuerda y la transformó en telaraña e hizo lo mismo con Aracne,
que la convirtó en araña, de ahí el nombre de los arácnidos y de las arañas.
ARGO
Un
gigante de cien ojos (también llamado Panoptes) que fue designado por la diosa Hera, mujer de Zeus, para custodiar a Ío, de
la que tenía celos. Zeus, que favorecía a su amante Ío, la convirtió en vaca para protegerla de Hera. Enviado por Zeus para
rescatar a Ío, el dios Hermes hizo mediante el recurso de la música que Argo cerrase sus ojos para dormirse y luego lo mató
cortándole la cabeza. En una versión de esta historia, Argo se transformó a continuación en un pavo real; en otra, Hera trasplantó
sus ojos a la cola del pavo real.
HARPÍAS
Monstruos alados con cabeza y pecho de mujer, y cuerpo y garras de aves de presa; en la creencia popular, eran agentes
de la venganza divina.
DAFNE
Ninfa
hija del dios del río Peneo. Era una cazadora que consagrada a Ártemis, diosa de la caza, y, como ésta, se negaba a casarse.
El dios Apolo se enamoró de Dafne y, cuando ella rechazó sus requerimientos, él la persiguió por el bosque. Suplicó a su padre
que la ayudara y, como Apolo insistiera en cortejarla, la ninfa se transformó en un laurel (daphne en griego). Desconsolado
por la transformación de Dafne, Apolo hizo del laurel su árbol sagrado.
ECO
Ninfa
de la montaña. El dios supremo, Zeus, la persuadió de entretener a su mujer, Hera, con una charla incesante, para que ésta
no pudiese espiarlo. Irritada, Hera le quitó a Eco el poder de hablar, dejándole sólo la facultad de repetir la sílaba final
de cada palabra que oyera. Un amor no correspondido por el bello Narciso, que amaba a su propia imagen reflejada, hizo que
Eco languideciera hasta que sólo quedó de ella su voz.
EDIPO
Rey
de Tebas. Hijo de Yocasta y Layo. Asesinó a su padre sin saberlo y se casó con su madre. Al enterarse se sacó los ojos.
EUROPA
Hija
de Agenor, el rey fenicio de Tiro, y hermana de Cadmo, el legendario fundador de Tebas. Una mañana, cuando Europa estaba juntando
flores a orillas del mar, el dios Zeus la vio y se enamoró de ella. Se presentó bajo la apariencia de un hermoso toro de color
castaño, y la convenció para que montara sobre su lomo. Al subirse Europa él salió a la carrera a través del océano hasta
la isla de Creta. Minos y Radamantis fueron hijos de Zeus y Europa y llegaron a ser jueces de los muertos.
GALATEA
una de las cincuenta nereidas, las hijas de Nereo, el viejo hombre del mar. La alegre y burlona ninfa del mar había despertado
el amor del cíclope Polifemo, un feo gigante con un único ojo en medio de la frente. Galatea, sin embargo, no correspondió
a su amor; ella lo provocaba y ridiculizaba, alentando sus esperanzas con palabras amables, pero rechazándolo. En leyendas
posteriores, aunque su actitud frente al pesar amoroso del cíclope se hizo menos áspera, Polifemo nunca pudo obtener sus favores.
Galatea finalmente se enamoró de Acis, un príncipe joven y hermoso a quien Polifemo mató en un arranque de celos.
GANIMEDES
Un joven y hermoso príncipe troyano a quien el dios Zeus, con figura de águila, raptó mientras se encontraba en medio
de sus compañeros, y lo llevó al monte Olimpo. El dios supremo le otorgó la inmortalidad e hizo que sustituyera a Hebe, diosa
de la juventud, como copero de los dioses. Ganimedes llegó a identificarse posteriormente con la constelación Acuario, el
aguador.
GORGONAS
Las hijas monstruosas de Forcis, dios del mar, y de Ceto, su esposa. Eran criaturas terroríficas, parecidas a dragones,
cubiertas de escamas doradas y con serpientes en lugar de cabellos. Tenían alas fuertes, rostros redondos y horribles, dientes
como colmillos y siempre llevaban la lengua fuera. Vivían en lo más lejano del océano occidental, temidas por las gentes,
ya que volvían de piedra a todo el que las miraban.
Dos de las górgonas, Esteno y
Euríale, eran inmortales, mientras que Medusa era mortal. El héroe Perseo, joven galante pero insensato, se ofreció a matarla
y volver con su cabeza, lo que hizo con la ayuda de Hermes y Atenea. De la sangre de Medusa surgió Pegaso, el caballo alado
engendrado por Poseidón.
HELENA DE TROYA
La mujer más bella de Grecia, hija del dios Zeus y de Leda, mujer del rey Tindáreo de Esparta. De niña fue raptada
por el héroe Teseo, quien esperó el tiempo necesario para casarse con ella, pero sus hermanos, Cástor y Pólux, la rescataron.
Más tarde, su fatal belleza fue la causa directa de la guerra de Troya.
HIPÓLITO
Hijo del héroe tebano Teseo y de su mujer Hipólita, reina de las amazonas, o tal vez hijo de Antíope, hermana de Hipólita.
Hipólito era un excelente cazador y auriga, devoto servidor de Ártemis, diosa de la caza. Hipólito despreciaba a todas las
mujeres, y cuando su madrastra Fedra se enamoró de él, rechazó sus insinuaciones. Desesperada por este rechazo, Fedra se suicidó
y dejó una nota en la que acusaba a Hipólito de haber intentado violarla. Teseo, creyendo culpable a su hijo, invocó a su
padre, Poseidón, dios del mar, para que destruyera a Hipólito. Cuando el joven conducía su carro por la costa, Poseidón envió
un monstruo marino que espantó a sus caballos; éstos se escaparon, el carro se estrelló y se hizo pedazos. Mortalmente herido,
fue llevado ante su padre, quien, mientras tanto, había sabido por Ártemis que su hijo era inocente. Cuando Hipólito murió,
el desconsolado padre y su hijo se habían reconciliado.
ÍCARO Y DÉDALO
Dédalo era el arquitecto e inventor que diseñó para el rey Minos de Creta el laberinto en el que fue aprisionado
el Minotauro, un monstruo comedor de hombres que era mitad hombre y mitad toro. El laberinto fue tan hábilmente diseñado que
nadie podía escapar de ese espacio intrincado o del Minotauro. Dédalo reveló el secreto del laberinto sólo a Ariadna, hija
de Minos, y ella ayudó a su amante, el héroe ateniense Teseo, a matar al monstruo y escapar. Encolerizado por la fuga, Minos
encarceló a Dédalo y a su hijo Ícaro en el laberinto. Aunque los prisioneros no podían encontrar la salida, Dédalo fabricó
alas de cera para que ambos pudieran salir volando del laberinto. Ícaro, sin embargo, voló demasiado cerca del sol; sus alas
se derritieron y cayó al mar. Dédalo voló hasta Sicilia, donde fue recibido por el rey Cócalo. Minos persiguió después a Dédalo
pero las hijas de Cócalo lo mataron.
JACINTO
Hermoso joven espartano amado por Apolo, dios del sol, y por Céfiro, dios del viento del Oeste. Un día, mientras Apolo
enseñaba al joven a lanzar el disco, el dios mató accidentalmente a Jacinto. De la sangre del joven, Apolo hizo brotar una
flor (no el jacinto, exactamente, sino el lirio o la espuela), que llevaba inscrita en cada pétalo una exclamación de lamento.
De acuerdo con otra leyenda, Céfiro estaba celoso del amor del joven por Apolo y, lanzando el disco, consiguió herir a Jacinto.
MEDEA
Hechicera,
hija de Eetes, rey de Colquidae. Cuando el héroe Jasón, al frente de los argonautas, llegó a Colquidae en busca del vellocino
de oro, Medea se enamoró desesperadamente de él. A cambio de la promesa de Jasón de una fidelidad duradera y de llevarla a
Grecia con él, se sirvió de sus poderes mágicos para permitirle engañar a su padre y obtener el vellocino. Medea zarpó entonces
de Colquidae con Jasón, llevándose a Apsirto, su joven hermano, con ella. Para escapar de la persecución de Eetes, Medea mató
a Apsirto y dispersó sus restos en el mar. El rey se detuvo a recogerlos y la demora permitió escapar a Jasón y a su grupo.
En otra leyenda, es Jasón quien mata a Apsirto después de que Eetes lo envía en persecución de los fugitivos.
Cuando Jasón y Medea llegaron a Grecia, supieron que Pelias, el malvado tío de Jasón, había sido responsable
de la muerte de los padres del héroe. Para vengar sus muertes, Jasón pidió una vez más a Medea que lo ayudara con su magia.
Complaciente siempre a sus deseos, la hechicera consiguió la muerte de Pelias mediante una astuta estratagema. Les dijo a
sus hijas que sabía cómo ellas podían hacer que su anciano padre recuperara la juventud y, para demostrarlo, descuartizó a
una oveja de muchos años y puso los trozos a hervir. Después, soltó a un cordero joven, encantador y juguetón, que surgió
de la caldera de agua caliente. Las hijas se convencieron de que podían rejuvenecer de manera semejante a su padre. Así, después
de darle Medea a Pelias un poderoso narcótico, las hijas se dispusieron a cortarlo en pedazos, pero Medea desapareció sin
decir las palabras mágicas que le habrían devuelto la vida. Después de esto, Jasón y Medea zarparon hacia Corinto, donde tuvieron
dos hijos. Vivieron felices hasta que Jasón se enamoró de la hija del rey Creonte. Para vengarse, Medea mató a su rival enviándole
un vestido envenenado. Temiendo que el padre intentara vengar la muerte de su hija haciendo daño a sus hijos, ella los mató.
Medea escapó de la ira de Jasón abandonando Corinto en un carro alado en dirección a Atenas.
Allí logró gran influencia sobre el rey Egeo. Gracias a sus poderes como maga, se dio cuenta de que Egeo era, sin saberlo,
el padre de Teseo, un joven héroe que en ese momento llegaba a Atenas. Ella no deseaba que su influencia sobre Egeo se viera
afectada por la aparición de un hijo, así que tramó con Egeo invitar a Teseo a un banquete y le dio un vaso con una bebida
envenenada. Egeo voluntariamente conspiró con ella por miedo a que los atenienses prefirieran al popular y joven héroe antes
que a él y quisieran colocar a Teseo en el trono. Afortunadamente, Teseo le hizo saber que era su hijo y Egeo arrojó el vaso
con veneno. Medea escapó de la ira de Egeo y se fue a Asia.
PANDORA
Primera mujer sobre la tierra, creada por el dios Hefesto por requerimiento del dios Zeus. Zeus deseaba contrarrestar
la bendición del fuego, que el titán Prometeo había robado a los dioses para entregárselo a los seres humanos. Dotada por
los dioses de todos los atributos de la belleza y la bondad, Pandora fue enviada a Epimeteo, quien se sintió feliz de tenerla
como esposa, aunque su hermano Prometeo le había advertido que no aceptase nada que viniese de Zeus. Al ofrecer sus presentes
a Pandora, los dioses le habían dado una caja, advirtiéndole que nunca la abriera. Su curiosidad, sin embargo, la hizo abrir
la misteriosa caja, de la que brotaron innumerables males para el cuerpo y tormentos para la mente. Aterrorizada, intentó
cerrarla, pero sólo quedaba Esperanza, lo único bueno entre los muchos males que contenía la caja, para confortar a la humanidad
en sus infortunios. En otra leyenda, la caja contenía bienes que se habrían conservado si Pandora no les hubiera permitido
escapar.
PSIQUE
Hermosa
princesa amada por Cupido, dios del amor. Celosa por la belleza de Psique, Venus, diosa del amor, ordenó a su hijo, Cupido,
que hiciera enamorar a Psique del hombre más feo del mundo. Afortunadamente para Psique, fue Cupido quien se enamoró de ella
y la llevó a un palacio aislado donde la visitaba sólo por la noche, sin que ella lo viera ni lo reconociera. Aunque Cupido
le había rogado encarecidamente que no lo mirara a la cara, una noche Psique encendió una lámpara y lo contempló mientras
dormía. Por haberlo desobedecido, Cupido la abandonó, y Psique quedó desolada, vagando a través del mundo en su búsqueda.
Finalmente, después de muchos intentos, se reunió con Cupido, y Júpiter, rey de los dioses, la hizo inmortal.
SIRENAS
Ninfas del mar, con cuerpo de ave y cabeza de mujer, hijas del dios marino Forcis. Las sirenas tenían una voz de tal
dulzura que los marinos que oían sus canciones eran atraídos hacia las rocas sobre las que las ninfas cantaban. El héroe griego
Odiseo fue capaz de seguir adelante al pasar frente a su isla porque, siguiendo el consejo de la hechicera Circe, tapó los
oídos de sus compañeros con cera y él mismo se hizo atar al mástil de la nave para oír las canciones sin peligro. En otra
leyenda, los Argonautas escaparon de las sirenas porque Orfeo, que estaba a bordo de la nave Argo, cantó tan dulcemente que
consiguió anular el efecto de la canción de las ninfas. Según leyendas posteriores, las sirenas, avergonzadas por la huida
de Odiseo o por la victoria de Orfeo, se arrojaron al mar y perecieron.
SÍSIFO
Rey
de Corinto, hijo de Eolo, rey de Tesalia. Sísifo observó cómo el dios Zeus se llevaba a la hermosa joven Egina y le contó
a su padre lo que había visto. Enfurecido con Sísifo, Zeus lo condenó al Tártaro, donde estaba obligado a llevar eternamente
a la cima de una colina una piedra, que siempre caía rodando y, por tanto, su esfuerzo debía recomenzar